"La esquina de los días que se escapan"
es una escultura de Adolfo Manzano, situada en el extremo oriental de la playa, que también llaman la Senda del Cervigón, un paseo hermoso que hay en Gijón. Se trata de unos cuadrados de mármol blanco con cuencos apilados de manera desigual. Hace poco por casualidad escuché al escultor explicar su obra y lo que antes eran formas misteriosas ahora tienen su significado,simbolizan las pequeñas cosas perdidas que alguna vez formaron parte de nuestra vida. El mármol siempre me pareció demasiado frío para sentarse, hubiera preferido madera, pero quizás los días que se escapan son fríos como esos acantilados que van erosionándose con el paso del tiempo.
Las esculturas en sitios donde la naturaleza es tan ostentosa tiene casi un significado de conquista. La esquina con sus piedras y su verde pisado sería suficiente para evocar cualquier cosa, pero el hombre necesita hacerse presente y recordarnos su existencia con vanidad, la vanidad fría del mármol blanco.
