domingo, 11 de octubre de 2009

Reflexión material 1.Aprendiendo a nadar

Había una vez un filósofo que estaba muy orgulloso de sus conocimientos. Cada día iba al río y se sentaba en la orilla. Allí comenzaba a leer en voz alta las obras de los grandes autores de la época, pidiendo a la gente que dejara sus ocupaciones y se interesara por la filosofía.

Sin embargo, en el río había un pescador que no se inmutaba en absoluto con los discursos del filósofo y éste, intrigado, un día decidió cruzar con su barca a la otra orilla. Mientras hacía esto, le preguntó al pescador:
- ¿Has estudiado filosofía?
- No -le respondió el pescador con sencillez.
- Entonces, amigo, has perdido la mitad de tu vida.

El pescador se limitó a sonreír y siguió remando hacia la otra orilla. Sin embargo, al llegar a la mitad del río, un remolino volteó la barca y ambos cayeron al agua. Entonces el pescador le preguntó al filósofo:
- ¿Sabes nadar?
- No -respondió el filósofo naturalmente inquieto.
- Entonces, amigo, has perdido toda tu vida.

Cuentos del Sahara "Bajo la jaima"