¿Por qué tendría que quitarme los tacones si estoy en mi casa? –responde la vecina.
Intuyo que para sus adentros se hará en décimas de segundo la siguiente reflexión:00000 euros metro cuadrado. 30 años de hipoteca, una vida para pagarlo.
-Váyase al campo si quiere silencio-responde convencida.
Esta mujer es joven, trabajadora, con hijos adolescentes que estudian en el Instituto Educación para la Ciudadanía. Ojalá haya suerte y entiendan de qué va eso.
La casa de las babayagas
