lunes, 23 de mayo de 2011

Reflexión espiritual 210.Eolo.

Eolo se había hecho treinta años más viejo, se había hecho fuerte y paciente junto a Dulcinea, la serpiente curiosa vaga y cantarina. Eolo en sus viajes espaciales recuperaba todos los años la estrella azul que les hacía pacientes en la cocina y en los dolores de barriga. Una estrella cantarina recordando que se querían.