En los pueblos pequeños todo parece al mismo tiempo cruel o normal,
como si el dolor no existiera o se guardara paciente tras los cristales
entre la peña y la huerta.
Quizás el ir y venir permita esa distancia descansada y benefactora.
Hoy vi su foto en el periódico , la foto de"la nenita",
de Carmen Alonso defendiendo ALPE , la Asociación que lucha por los derechos de chavales que sufren y resisten y salen a flote gracias a sonrisas como la suya.
La misma sonrisa de hace tiempo y
ese cansancio enérgico de lucha infinita.